A este patio se accede por un zaguán, en cuya entrada aparece la fecha 1873.
En él destaca el pozo y la cuidada distribución de las macetas, entre las que vemos flores de pascua, alegrías o permanentes, cintas, helechos, kentias,... y un jazmín.
Tenemos que decir que este patio tiene mucho mérito, pues lo cuida un niño al que le encantan las plantas. No es fácil encontrar a niños con esta bonita afición.